2193 y la Unión del
Continente

 Un viaje a un lejano futuro pronostica la formación de nuevas organizaciones hemisféricas que agruparán a ciudades pujantes. Un viajero cuenta que, aún con todos los avances, han quedado arraigadas costumbres propias de la región. El Teatro Baralt seguiría en pie. 

Jorge Chacón

Jorge Chacón

Falcón. Licenciado en Música y Educación de la Universidad Católica Cecilio Acosta (Unica)

MARACAIBO FORMA PARTE DE LA UNIÓN DEL CONTINENTE AMERICANO DE 2149

Son algo así como las 9:30 am y suena mi teléfono; es un amigo comunicador social muy activo que luego de un buen saludo va directo al grano; “Jorge, ¿quieres escribir algo relacionado con que visión tendrías tú de Maracaibo en el futuro?, de temática totalmente libre, pero pensando en unos ciento cincuenta o doscientos años más adelante” contesté, ok, me anoto en esa.

 

Supongamos es la mañana de un día de noviembre del año 2193 y un entusiasta inversionista y empresario español de 46 años se encuentra por primera vez en la ciudad de Maracaibo en un viaje de negocios y placer, dispuesto a conquistar el terreno de la industrialización creciente y avanzada de Venezuela, en un país que tras largos y deprimentes años de agonía en este 2193 se levanta, ya desde hace un poco más de treinta años, como una nación de vibrante empuje comercial internacional, gracias a la organización “Unión del Continente Americano” que se estableció a comienzos del año 2149.  Han quedado en el pasado esas historias oscuras de los años del siglo veintiuno y de un planeta sumergido en incertidumbres creadas a manos llenas por el completo ir raciocinio de la raza humana que dirigió ese siglo y que terminó por colapsar a comienzos del 2099.

 

Entonces este imaginario empresario español empieza a conocer esta ciudad portuaria internacional, tan popular en las bocas de miles de personas que la han conocido en todo el mundo. Es una metrópolis modernizada a pasos agigantados en los últimos treinta años de bonanza financiera, brinda todas las comodidades tecnológicas y estructurales del modernismo super avanzado de esta época futurista. Pero una peculiaridad encanta e impacta a nuestro visitante. Tal cual como le mencionaron, Maracaibo le ofrece una extraña combinación de modernidad con historia, una historia que podría remontarse a cientos de años atrás; arquitectura, costumbres, colores, vestimentas, ruidos, amabilidad, jolgorio, comidas y un sin fin de cultura que no es muy propia del mundo del año 2193.

 

Maracaibo, aunque ha hecho propia para sí y para sus nuevos habitantes un compendio de mezcla sociocultural como un concepto mundial de su vida cotidiana, nunca ha abandonado sus raíces más ancestrales. En un teatro llamado “Baralt” se encuentran realizando una mezcla musical del mejor Pop Universal con gaita de Furro y afuera, en la calle, en un gran parque natural que alberga un impresionante reservorio de plantas de todo el mundo, mientras algunos niños juegan con unos asombrosos efectos de realidad virtual holográfica, otros tantos están atrapados en el encanto que les muestra un joven citadino que les muestra lo bonito que vuelan unos hermosos volantines hechos con material reciclable y en una esquina cercana es posible apreciar, junto a una serie de locales que venden más de diez mil tipos de bebidas mundiales, a dos hombres con unos alegóricos y llamativos carritos en bicicleta; uno con una gran variedad de cepilla’os y el otro haciendo alarde de su grandiosa habilidad para partir cocos y convertirlos en una exquisita bebida con agua fría.

 

No sé realmente si este sea el futuro de Maracaibo al pasar de 170 años, pero si estoy muy seguro que es esta la única forma en que quiero imaginármelo, avanzada, llena de miles de culturas y miles de visitantes de todo el mundo, pero con el orgullo y el regionalismo intacto e imperecedero.

 

«La raza humana, tal y como se conocía a principios del siglo XXI, terminó por colapsar a comienzos de 2099».

Jorge Chacón

Jorge Chacón

NLcdo. En Música y Educación, egresado de la Universidad Católica Cecilio Acosta de Maracaibo. Gestor y coordinador de Arte y Cultura Universitario (UPEL, Tecnológico Sucre, Politécnico Santiago Mariño y Universidad Dr. José Gregorio Hernández)
Profesor de Canto y Oratoria, Compositor
Manager y representante Artístico de @liliarteyestilo
Nacido en Falcón en el seno de una familia maracucha adoptó desde niño la identidad e idiosincrasia Marabina.
Desde 1991 se muda y hecha raíces en Maracaibo.
Gaitero, ex integrante de Quinto Criollo, Cantante de las Orquestas sinfónicas del Zulia y Maracaibo, parte del equipo de coordinadores académicos fundadores de de Fundagraez.