Barredoras inteligentes, drones y microrobots, la futurística solución para sanear el Lago
¿Será la mano de un robot y no la humana quien logre sanear el estuario zuliano? Un grupo de ciudadanos plantean una utopía del Lago que fue recreada con la Inteligencia Artificial para visualizar un Zulia ideal, donde los palafitos inteligentes existen e incluso, la conciencia ciudadana es diferente
Robert Arámbulo
Maracaibo (1998). Licenciado en Comunicación Social, graduado en la Universidad Católica Cecilio Acosta (Unica), mención Desarrollo Social. Actual Premio Regional de Periodismo.
Una nave voladora de garras mecánicas con una fuerza tan potente como para extraer residuos recorre el Lago de Maracaibo, mientras un barco barredor surca sus aguas con una cinta procesadora para recolectar los desechos que lo contaminan al estuario zuliano.
Así, con un perspectiva futurista que pareciera estar pensada por los creadores de la icónica serie animada “Los Supersónicos”, son las propuestas que plantean las antiguas y nuevas generaciones de zulianos que anhelan volver a tener una “fuente divina” llena de “plenitud y transparencia” para el reservorio de agua más grande de América Latina.
Aunque el viaje al futuro apenas arranca, los habitantes desean ver su Lago con una intachable salud ambiental ¿Será la mano de un robot y no la humana quien logre sanarlo?
Barredora, una depuradora de desechos
Entusiasta y positivo el ingeniero Andrés Mafiol, director del Grupo Luxo, ve posible este panorama. Él concibe la idea de que las llamadas barredoras de agua se podrían implementar en menos de 20 años.
“La barredora la diseñamos y digitalizamos. Es una barcaza que dispone un espacio para acumular los desechos. También tiene una cinta trasportadora en el frente y, por el diferenciar de la superficie del agua y la extracción de la cinta, va recogiendo y movilizando los desechos al cajón de depósito”, detalla el joven, justo a orillas del Lago en El Milagro.
El “motiondesigner” dice que esta idea surgió dada la necesidad que el mismo estuario planteó. “Al ver que era una emergencia muy fuerte la que teníamos, me conmovió muchísimo que había más personas dolientes del Lago. Así que me tome el atrevimiento de diseñar una barredora para generar en una conciencia de que podemos ser mejores y que lograremos extraer los desechos y productos que caen al agua de manera física”, refiere.
Mafiol resalta que esta máquina permitiría ir depurando la cantidad de desechos sólidos. Sin embargo, “no se podría extraer metales pesados, disueltos como el petróleo o aceite, pero es un comienzo que ayudaría en un alto porcentaje al Lago”.
“En Venezuela hay extremadamente mucho talento, sobre todo las personas que se han quedado y adaptado a las circunstancias actuales del país, pero la ingeniera del país ha visto crecer a cualquier cantidad de especialistas completamente capacitados para hacer la barredora. Su diseño es sumamente sencillo”, enaltece el ingeniero.
Para Andrés, “el cielo es el límite” en cuanto a la recuperación futura del Lago. La oxigenación del estuario con microburbujas, la recopilación de desechos en las playas con aspiradoras especiales. Así como resinas de intercambio iónico para quitar los metales pesados desde el Lago, son otras de las sus opiniones futuristas.
Incluso la propia IA lo prevé, como es el caso de ChatGPT, un modelo avanzado de lenguaje que sugiere la implementación de la nanotecnología de filtración, que describe como la herramienta que permitiría eliminar contaminantes químicos y metales pesados del agua. Además, propone emplear robots submarinos autónomos equipados con sensores para monitorear continuamente la calidad del agua y detectar fuentes de contaminación.
¡Advertencia! Evita una extinción masiva
Este modelo de inteligencia artificial también advierte de la ebullición global y una extinción masiva, que podría comenzar por la desaparición del agua dulce, un aterrador panorama que además fue expuesto a Versión Final por Adelso Pineda, director de Fitlosophy y presidente de la Fundación X Lago Maracaibo.
Desde su club deportivo de playa, donde se ejecutan diversas actividades ambientales y turísticas, detrás del Hotel Tibisay, el empresario define su visión de un Zulia futuro con la proyección indispensable de un nuevo modelo de ciudadanía que sea más consiente del uso de recursos naturales, de la importancia de la preservación de Lago, factores que podrían evitar la conclusión de esta masa de agua. “Un estuario que es nuestro y que en los últimos años se han acentuado y se ha hecho un caso omiso de a lo que nos enfrentamos”, dice.
“Nos enfrentamos a una extinción masiva. En cualquier momento la cadena atrófica se llevará a la especie humana. Conservar nuestros espacios es sumamente importante para que puedan sobrevivir y de cierta forma, establecer líneas estratégicas para recuperar los recursos naturales con líneas hechas por nosotros”, reitera.
Razón por la que cree que el Lago en 50 o 100 años contendrá plantas procesadoras y cultivadoras cianobacterias (Verdín) que pueden funcionar para energía limpia como biocombustibles y biofertilizantes.
“La biomasa que se puede cultivar en el lago de Maracaibo es 189 mil toneladas al año”, precisa Pineda.
Al imaginar y dejarse llevar por el concepto de “Zulia futuro”, el CEO de Fitlosophy también cree que el estado petrolero podría ser garante del espacio con más agua dulce del mundo, un pensamiento que ingenió de la siguiente forma:
“El Lago de Maracaibo tiene aproximadamente 14 mil kilómetros cuadrados y es alimentado por unos 140 ríos y riachuelos. Imaginemos que cerremos el canal de navegación y se lleva arriba lo que es el puerto que existe en la ciudad y se cultive el Lago con agua dulce, pasaríamos a tener el recinto con más agua dulce del planeta”, expresa.
Pero esto no lo único que se podría hacer por el Lago en unos cuantos años, ChatGPT también visualiza al estuario del Zulia con “drones equipados con sensores para recopilar datos en tiempo real sobre la calidad del agua, la contaminación y las áreas problemáticas”.
“Estos equipos tecnológicos y acciones futuristas podrían combinarse en un enfoque integral para enfrentar los desafíos de saneamiento del Lago de Maracaibo y trabajar hacia su recuperación a largo plazo. Además, es importante destacar que cualquier solución exitosa requerirá la cooperación de múltiples partes interesadas, incluidos gobiernos, científicos, empresas y la comunidad local”, contextualiza el generador avanzado.
¿Son posibles los palafitos inteligentes?
En este sentido, Lenín Parra, biólogo y profesor de la Universidad Bolivariana de Venezuela (UBV), señala que este sistema de vigilancia permitiría ver dónde está ocurriendo algún ilícito ambiental, por lo que cree que se puedan tomar las correcciones o en el caso contrario, se le dé culpa a la persona que no cumple la ley que protege el medio ambiente.
Entre una brisa fuerte, mezclada con la fuerte temperatura de Maracaibo y el pestilente olor que emerge por el verdín del Lago, el especialista deja ir su imaginación más allá de los drones y explica uno de sus sueños: la edificación de comunidades suburbanas tipo palafitos dentro del Lago.
Para él, estas viviendas deberían ser diseñadas con todo el tratamiento de agua y nueva generación de energía, como si se trataran de oasis tecnológicos que acerquen al ciudadano a esta masa de agua o como si se repensara estas casas con pilotes bañados por el mar.
“Primeramente, dentro de todos estos años debe haber un cambio en la sociedad con el tema de la inteligencia artificial, las redes sociales y las experiencias de educación en línea”, añade Parra.
Su propuesta es como mezclar la antigua actividad que se desarrollaba sobre el Lago a las nuevas funciones y obras. Es imaginar unos pequeños oasis de vida cotidiana que se convergerían entre la inmensidad del azul del cielo y la infinita línea que forma el agua.
Aunque Andrés, Adelso y Lenin tienen una amplia experiencia en sus áreas y perspectivas basadas en sus estudios, también hay ciudadanos que desean soñar desde su aporte diario la ciudad, como el caso de la niña ambientalista, Abigaíl Cárdenas.
Sentada sobre una silla de madera desgastada, con su mirada sobre la corriente que arrastra botellas, juguetes y hasta el caparazón de una nevera, recrea lo que sería para ella un “Zulia prometedor” en el que las acciones del presente diseñarían un estado futurista.
“Podemos idear algunas máquinas para recolectar los plásticos y desechos de las orillas (…) Sería ideal inventar una inteligencia artificial (IA) que sirva para poder separar los residuos que existen aquí”, comenta la maracaibera, popular por trasmitir mensajes ambientales de impacto para la región.
Con un suspiro e ingenuidad, Abigaíl marca la idea de poder llegar a su longevidad con un panorama distinto del Lago y al igual que ella, otros ciudadanos se esperanzan con el tan esperado saneamiento que podría ser alcanzado gracias a las venideras tecnologías.
Un llamado del ahora como refuerzo para el futuro
Mientras el futuro se avecina, la jovencita asoma la posibilidad de la creación de puntos verdes. La joven lo visualiza así: un espacio de unos 30 metros ubicado en zonas comunes, como la vereda del Lago. Deberán tener sensores y respuesta tecnológica para hablar con los usuarios de distintos temas ambientales.
“Se me viene a la mente hacer unos puntos de acceso desplegados a través de todo el país que indiquen algunas acciones que podemos hacer de forma ambiental. Incluso podemos poner a una inteligencia artificial que lo dicte, es una idea futurista que ayudaría”, considera.
Con sus ojos brillosos ante la idea, Abigaíl también traza el objetivo de tener unos “postes de información ambiental” que dicten medidas que pueden tomar los ciudadanos a favor del ecosistema. “También podrían dar las características de algunos animales que se encuentren en estado de vulnerabilidad”, añade, al tiempo, que piensa que se deberían trabajar con realidad aumentada para que la persona sienta que trata a la especie.
“El presente es la clave del futuro. Nosotros debemos tomar acciones desde nuestro hoy para poder cambiar lo que seremos en unos años. Hay muchas labores que están en nuestras manos y que podemos empezar a realizar desde ya e irlas introduciendo en nuestros hábitos con mucha delicadeza”, agrega.
La perspectiva de Adelso Pineda coincide con lo planteado por Abigaíl. Señala que el Zulia futuro debe estar direccionado y creado por un ciudadano más consiente.
“Debemos recordar que el lago es un ser vivo, de los más antiguos del planeta. Además, tendremos que comprender que este debe ser un escenario que ya quedó en el pasado y que se levanta con nuevas acciones en comunión con su población para que de cierta forma se recupere su integridad. Una puesta más hermosa, armonía y de aprovechamiento consiente de sus recursos naturales”, finaliza.
Estos empresarios, ambientalistas y profesionales esperan que la conciencia ciudadana toque tierra y se aboque desde el ciudadano al Gobierno. Por lo que consideran que la tecnología podría ir abriendo paso en la mentalidad del habitante.